|
¡Irreconocible!
Seis meses a punta de malteadas y ejercicio lo Ilevaron a cumplir su
meta. Desde que Andrés Sandoval aceptó el personaje de Marcelo en Zona
rosa se propuso, sin contárselo a nadie, lucir muy delgado. El hecho
que lo impulsó a ponerse a dieta no tiene nada que ver con la vanidad. Su
pasión por el arte dramático fue lo que determinó el cambio.
Resulta que su personaje en la serie que TeleColombia produce para el
Canal RCN sufre una enfermedad terminal, y para salirse del maquillaje
cliché de la piel pálida y las ojeras, prefirió bajar de peso gradualmente;
de esta manera, el decaimiento físico se vería más real. "No me importa la
apariencia; por eso, mi imagen depende de lo que requiera un personaje.
De hecho, para encarnar a Albeiro en Juego limpio se dejó el
pelo largo y alzó pesas para tonificar sus músculos, pues Albeiro era un
futbolista. Luego, para darle vida a un vigilante en El vuelo de la
cometa, tomó cerveza para verse barrigón, y en La jaula,
en la que personificó a Tomás, lo vimos con un look de
estudiante: de pelo cortico y desordenado. Quien más disfruta todos estos
cambios de Andrés es su esposa, la actriz Pilar Gómez. Lo más lindo que me
ha dicho desde que nos conocernos es que rne admira por el compromiso que
adquiero con mis personajes ; cuenta el actor bogota no de 25 años.
`DIETA ACTORAL
El primer paso para bajar de peso fue dejar lo que rnás le gusta: el
dulce. Luego reemplazó el desayuno y las comidas por batidos nutritivos, y
se dedicó a entrenar, pero no precisamente en un gimnasio. Se vinculó
al grupo de teatro antropológico Theo-Terrenus, que tiene un método especial
para que los actores superen el cansancio físico. El ejercicio continuo que
realizó con ese grupo en el Parque Nacional, de Bogotá, sumado a las bajas
calorías que ingirió, dio como resultado su nueva figura.
De 85 kilos que pesaba, bajó a 62. De ahí que ya no usa talla 34 en
pantalón, sino 28. Aunque tuvo que archivar muchas prendas en su armario por
el cambio de medidas, aspira a volver a ponerse esa ropa, pues apenas
termine de grabar Zona rosa, volverá a deleitarse con los postres que
tanto le fascinan. "La gente cree que estoy enfermo o que me adelgacé por
estética, pero nada que ver. Lo que sucede es que me apasiono exageradamente
por esta profesión y no quiero estereotiparme.
Tampoco le interesa ser galán de telenovelas. Es más, rechazó una
importante oferta que le hizo una productora con la condición de que se
operara la nariz, el mentón y rnarcara sus abdominales. "Prefiero abandonar
el trabajo; asegura.
Siguiendo con su estilo camaleónico, para el próximo personaje que hará
en la telenovela Okupas, que dirigirá Mario Ribero, Andrés
piensa ponerse un piercing en la ceja y otro en la frente, pues su nueva
misión es tener la imagen física de un roquero.
Tomado de la Revista TV y Novelas No.486, 16 de junio
de 2007 |